La búsqueda que nos hace humanos empieza en Sudáfrica, aquí
se esperó encontrar que fue aquello que nos transformó de bestias en seres
humanos, buscamos aquello que tal vez nos convierta en la criatura más singular
del planeta.
Todos los acontecimientos históricos de la evolución humana
se produjeron en el continente africano, hay decenas de miles de huesos
acumulados durante milenios en una zona muy compacta. Entre los cientos de
criaturas halladas enterradas en cuevas se encuentran los fósiles de tres de
nuestros antepasados más directos de nuestro árbol genealógico, uno de ellos es
el primer Homo Sapiens, desde hace unos 200 mil años, pero no es la primera
criatura que muestra rasgos humanos, hay dos especies más, pero solo una de
estas tres criaturas evolucionará convirtiéndose en lo que ahora es el hombre moderno.
- Primero
encontramos al Australopithecus Afarensis, pequeño y con poco cerebro pero
que consiguió erguirse y caminar sobre las dos piernas, lo que basta para
poder considerarle un antepasado humano.
- El
segundo denominado Homo Erectus, con un cerebro dos tercios parecido al
nuestro, pero fabricó herramientas y tenía gran capacidad para manejar el
fuego, lo que mostraba rasgos humanos.
- Finalmente,
la tercera especie es el primer Homo Sapiens, tenía nuestro mismo aspecto
y un cerebro similar, pero le faltaba mucho para parecerse y comportarse
como nosotros.
Finalmente, ¿qué es aquello que nos convierte en una
especie única?
Para responder a esta pregunta hay que remontarse a los años 70, donde se encontró una especia con una pelvis realmente parecida a la de los humanos, la misma que nos hace mantenernos erguidos y poder caminar, los científicos de estos años denominaron a esta especie como Australopithecus Afarensis, apodada Luci.
Hace 3 millones y medio de años, un grupo de Afarensis vivía
en una llanura africana que hoy es Tanzania. Un volcán provocó grandes cenizas,
que tras las lluvia se convirtieron en cemento donde fueron halladas las
huellas de varias especies Afarensis que paseaban, unas de las huellas más
importantes en la historia de la humanidad. Con esas huellas pudieron
reconstruir el aspecto de dicha especie, hace unos 4 millones de años, esta
criatura se puso en pie con rasgos muy similares a los humanos.
En 1984 se halló un esqueleto muy bien conservado a orillas
del Lago Turcana, clasificado como un Homo Erectus con su característica más
señalada, su enorme cráneo, lo que le bastó para poder caminar sobre dos patas.
Los Afarensis duró alrededor de 1 millón de años, el Homo
Erectus sin embargo, sobrevivió durante 2.5 millones de años antes de
extinguirse desarrollando antes un cerebro casi como el nuestro.
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